PERÚ.- Las últimas horas han sido un auténtico infierno para Julio Bascuñán, árbitro central cuya actuación en el Perú-Brasil dejó inconforme no solo a la selección inca, sino a toda una nación que de haber estado presente en el Estadio Nacional de Lima hubiese actuado de forma hostil.
Las críticas hacia Bascuñán se dirigieron a través de varias decisiones supuestamente a favor de la Canarinha, como la marcación dos polémicos penales, una expulsión perdonada a Richarlison y varios momentos bruscos que fueron pasados por alto, todos protagonizados por la visita.
El partido terminó 4-2 para Brasil y en redes sociales se notó el descontento de la afición peruana, quien se hizo presente en el hotel de concentración del árbitro central que en todo momento ha sido custodiado por los miembros de la seguridad.
Los diarios incas también destacaron el triste accionar arbitral y a Bascuñán lo tacharon de ratero en prácticamente todos los rotativos deportivos.