CIUDAD DE MÉXICO.- Anoche, ante Cruz Azul, las lesiones castigaron duro al América. La primera de ellas se presentó en el entrenamiento previo y el caído fue Guillermo Ochoa, situación que hizo saltar como titular al segundo portero, Óscar Jiménez.
Debido a esta imponderable, el cuerpo técnico de las Águilas, sabedor que necesitaba otro portero para cualquier emergencia, le lanzó el llamado a su canterano Fernando Tapia, a 20 minutos de que el balón empezara a rodar en el Estadio Azteca.
El juvenil, como todo un profesional, tomó rumbo al Coloso de Santa Úrsula y a pesar de no haber llegado del todo a tiempo, sí estuvo la mayoría del juego en las bancas, por si necesitaban de su ayuda.
Tapia llegó al Azteca de forma exprés gracias a que vive muy cerca del recinto, pero independientemente de ello, la madurez con la que tomó el reto seguramente hizo ganarse el respeto de todos sus compañeros.
Cabe señalar que el portero de Fuerzas Básicas ya había tenido actividad ayer domingo por la mañana, en la caída de las Águilas en las instalaciones de La Noria.